
Primera parte. Método.
(Fenomenología Hermenéutica Aplicada)
La fenomenología se basa en la comprensión de los fenómenos psicológicos y sociales y busca capturar las vivencias humanas, tal y como se experimentan —no como las conceptualizamos ni categorizamos— de una forma prereflexiva. Pretende, así, llegar a las estructuras de significado; es decir, a las estructuras de significado de la experiencia vivida. Se trata de “un proceso de apropiación, esclarecimiento y explicitación reflexiva de las estructuras de significado de la experiencia vivida” (Van Manen, 2003, p. 320).
La FH sigue una interacción dinámica entre seis actividades investigadoras (Van Manen, 2003):
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Centrarse en un fenómeno que interese y que comprometa con el mundo a la persona que investiga.
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Investigar la experiencia del modo en que se vive, y no tal como se conceptualiza.
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Reflexionar sobre los aspectos esenciales que caracterizan el fenómeno.
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Describir el fenómeno mediante el arte de escribir y reescribir.
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Sostener una relación pedagógica firme con el fenómeno y orientada hacia él.
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Equilibrar el contexto de la investigación siempre considerando las partes y el todo.
Una vez seleccionado el fenómeno de investigación se
debe investigar la experiencia tal y como se vive,
para ello hay que diferenciar entre el conocimiento
vivido prereflexivo y la percepción reflexiva
(Ayala-Carabajo, 2017; Van Manen, 2003).
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El conocimiento vivido pre-reflexivo
sobre el significado de algo (ejemplo: “vivencia del tiempo”).
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La percepción reflexiva que tenemos
de la estructura de significado de la experiencia vivida
(ejemplo: “¿qué es el tiempo?”).
En la investigación fenomenológica, el conocimiento vivido prereflexivo se recoge mediante los métodos empíricos descriptivos (relatos de experiencias, anécdotas y entrevista fenomenológica). Estos métodos tienen como objetivo principal recopilar descripciones de experiencias vividas (DEVs); en nuestro caso, DEVs de participación política siendo mujer-joven. Una vez recogidas estas descripciones, damos paso a la percepción reflexiva, implica un análisis de los aspectos estructurales o temáticos de la experiencia vivida; en nuestro caso, de los aspectos estructurales o temáticos de las experiencias de participación política siendo mujer-joven. Para ello, hacemos uso de los métodos reflexivos (análisis temático fenomenológico). El resultado, también, son descripciones fenomenológicas, pero, a diferencia de las anteriores, estas son ya resultado del análisis.
